Contrato de futuros
Un contrato de futuros es un contrato para comprar o para vender un valor o una mercancía en el futuro y a un precio fijo. Los contratos de futuros se utilizan para la especulación o la cobertura. Los especuladores juegan la fluctuación en el precio. La cobertura es el concepto de limitar su riesgo en el futuro tomando cierta acción ahora. Muchos negocios tienen que usar la cobertura para calcular sus beneficios o protegerse en el futuro.
El contrato de futuros es diferente que una opción, porque mientras que la opción es opcional para el dueño, el contrato de futuros es obligatorio para todos los partidos implicados. El contrato de futuros también es diferente que el contrato a plazo, porque el contrato de futuros negocia en un intercambio, y el contrato a plazo es un poco más informal. En la expiración del contrato de futuros, el dueño recibe la mercancía del vendedor, o puede recibir el equivalente en efectivo.
Los inversionistas compran o venden los contratos de futuros porque creen que cierta mercancía estará más alta en el futuro. Los fabricantes y otras compañías compran futuros para garantizar un precio para sus mercancías. Por ejemplo, las aerolíneas pueden comprar futuros en petróleo si creen que los precios van a aumentar en el futuro, para asegurar sus costos energéticos. Asimismo, un granjero que cree que el maíz va a bajar en precio puede vender un contrato de futuros ahora para garantizar el precio de venta del maíz en el futuro.
Ex: Usted es granjero de maíz, y cree que el precio disminuirá a $3 este año, debido a la fuente excesiva. El precio del maíz está actualmente en $6. Puede vender futuros ahora para vender todo su maíz por $6 en seis meses, asegurando su ganancia. Si en seis meses el maíz está a $4, fue buena transacción. Sin embargo, si el precio de maíz está en $10, usted pierde porque lo tiene que vender a $6 en vez de $10, pero eliminaste el riesgo, que es más importante para los granjeros que la ganancia adicional.
